MamaQuilla, el restaurante latinoamericano con nombre de mujer
Dedicado a la diosa inca de la luna y protectora de la mujer, este restaurante pone en valor la cocina latinoamericana de todos los tiempos, impulsada tradicionalmente por las mujeres.








Este local acaba de abrir sus puertas con el firme objetivo de darnos a conocer la gastronomía de Latinoamérica más popular, pero también aquella que forma parte de lugares remotos del continente, desde México, hasta Colombia, pasando por Brasil, Argentina o Perú. Desde el sabor de los ‘carritos’ a la salida de La Bombonera (Argentina), del taco de las calles de Oaxaca (México), de la bandeja paisa de los mercados de abastos de Bogotá (Colombia) y del ron guatemalteco (Guatemala) hasta el color de los chiles peruanos que visten las calles de Lima (Perú) y el olor a maracuyá que invade las calles de Río de Janeiro (Brasil), entre otras muchas evocaciones.
De estilo colonial en la entrada, este restaurante te mete de lleno, a medida de que vas avanzando por sus estancias, en el ambiente y la decoración latinoamericanos, además, los breves espectáculos marcados por música autóctona, completan la experiencia.
De base latina y elaborada con materia prima nacional, de parte de un equipo de cocina cosmopolita, en la carta —pensada para compartir—, se adaptan a diario los sabores de antaño al siglo XXI, tanto en los aperitivos como en los platos más complejos. Entre los primeros, encontramos los Pops de pollo de corral crujiente con pasta de tamarindo y chiles agridulces,l a Gilda que se perdió en Machu Picchu con shot de aceituna, las Arepitas de rabo de vaca (pipirriana con poblano y maracuyá) o el Taco al gobernador de soft shell crab (queso costeño ahumado y pico de gallo de hoja santa), mientras que, entre los segundos, el Pescado costeño frito entero con mayonesa de ají amarillo, el Ceviche verde de pargo verde (clorofilas, tirabeques a la brasa, maíz tatemado y alga kodium) o el Tiradito de pez limón con ponzu de huacatay (nopales encurtidos y ensalada refrescante para aliñar).
Y en el apartado de postres, destacamos el Coulant de chocolate fluido (con maíz y plátano), el Flan de queso cremoso Sopa de maracuyá y chantilly de Haba Tonka o El ritual de mamaquilla a la cultura latina: una creación en vivo y en directo con cacao, café y frutas tropicales tratadas a su tiempo y manera.
El viaje por el continente americano continúa a través de cócteles o aguardientes a base de rones, tequilas y mezcales. Uno de los más sorprendentes, la crema de tequila casera, que llaman tequilacho y que lleva un licor de almendras y pistacho, además del destilado mexicano. Además, este nuevo restaurante de la zona de Gregorio Marañón, dispone de un espacio dedicado a la coctelería, de ecos mexicanos, El Patio, donde el bartender Daniel Font, nos sorprende a diario con tragos viajeros, canallas y atrevidos, invitándonos a recorrer ciudades como Santo Domingo, Sinaloa, San Juan, Jalisco o La Habana. Recetas frutales, cítricas, tropicales y picantes, elaboradas con rones, tequilas, mezcales y en que sobresalen ingredientes como elaçai o el tomate de árbol.
Abre de lunes a sábado de 13.30 h a 16.00 h y de 20:30 h hasta que dure la fiesta; cierra los domingos; el bar abre de manera ininterrumpida de 13:30 h a cierre.




