Le Kañí, la asian brasserie en la que querrás dejarte ver

Se define como asian brasserie, pero, ¿qué es lo que podemos degustar en esta espectacular izakaya (barra japonesa) con toques de fusión franceses?

De luz tenue y aires clandestinos, nos propone unos edamame trufe para ir abriendo boca y nos invita a seguir con una amplia propuesta de sushi basada en bocados como yawata maki (con anguila ahumada y mayo de ajo negro) o spicy toto maki (chu toro laqueado y aguacate braseado); además de nigiris y sashimis. Mientras que, para ir abriendo boca,

En el capítulo de raw bar (bocados en crudo), destacan el tartar de atún sobre tuétano y raifort; mientras que, entre los entrantes para compartir, el supercruijiente softshell crab (cangrejo de caparazón blando) con bisque del cangrejo, mayo de sriracha, ralladura de lima y brotes de cilantro; o el okonomiyaki -la tortilla japonesa- de ika (calamar al black beurre blanc).

De la robata, tradicional parrilla japonesa, salen pescados, carnes y verduras, como el tataki de pato con salsa hoisin-niku que acompañamos con unos brócoli flamee con tahina. Para terminar, puede ponerse un broche dulce con exóticos postres como el pastel borracho con helado de bergamota, de intenso sabor o una canónica crème brûlée pero con helado de wasabi.

La velada puede alargarse con uno de sus cócteles de autor (aptos también para maridar con el banquete) y nosalegramos de que contemplen en la carta líquida algunas opciones sin alcohol; así como con sesiones de DJ en directo las noches de jueves, viernes y sábados. Y es que el local cuenta, al fondo, hasta con cabina de DJ. Decorado con elegancia moderna (luces tenues, tapicerías de terciopelo en tonos granate y verde oscuro, grandes lámparas con tulipas de tela y flecos) y cierto ‘rollo’ de lujo exótico (panteras salvajes e insectos dorados, vegetación, etc).

Con un precio medio de 50 €, abre de martes a jueves, de 13.30 a 16.00 h y de 20.00 a 23.30 h (cierra a la 1.00); viernes y sábados, hasta las 2.00 h; cierra lunes, domingos, y mediodías de sábados.