¿Dieta de la piña? Mejor apúntate a la ruta hipster
Las propiedades de la piña son de sobra conocidas. Es un alimento poco calórico, diurético, digestivo, depurativo, rico en vitaminas A, B y C, aminoácidos, proteínas y minerales. Por lo que, día sí y otro también, alguna revista femenina saca una nueva dieta de la piña, cada cual más milagrosa que la precedente. Pero, como somos más de comer por placer que para adelgazar… hemos decidido apuntarnos a la ‘ruta hipster de la piña’.
La idea es de la etiqueta negra de los italianos F.lli Orsero. Producida en Costa Rica y Colombia, esta piña llega al mercado en perfecto estado de maduración y frescura, ya que se controlan todos los procesos de la cadena: desde la plantación hasta el punto de venta.
Y lo de hipster se refiere más bien al tipo de locales que se han sumado a la iniciativa. Entre ellos, encontramos Saporem de Huertas (C/ Ventura de la Vega, 5), que nos propone una pizza hawaiana a base de piña y pesto de cilantro. Hecha en horno de leña, pero con una masa entre la de la coca y la de la pizza tradicional, constituye uno de los platos que sobresalen de la carta (y eso que en tema de pizzas somos bastante tiquis miquis ;-)). Si coges mesa en el patio interior, mejor que mejor.
El restaurante Ana La Santa (Plaza de Santa Ana, 14) ha optado por elaborar una presa ibérica cocinada al grill y marinada con chutney de piña. ¿Cómo mejorar esta receta? Saboreándola en su acogedor jardín.
80 Grados (C/ Manuela Malasaña, 10), un restaurante que toma su nombre de la técnica de cocción a baja temperatura que utiliza en todos los platos de su carta, sirve un tartar de piña a la lima con crema de moscovado y helado de vainilla. La piña está cortada en brunoise y macerada al vacío durante toda la noche en un jarabe de anís estrellado que se cocina por debajo de esos 80º para preservar el sabor y los nutrientes de la piña.
Para merendar nos dirigimos a Toma Café ( C/ Palma, 49), un local muy pequeño pero imprescindible para los cafeteros. Su café es 100% natural, de la variedad arábica y tostado en el propio establecimiento y su repostería es totalmente artesana y elaborada únicamente con productos ecológicos. Para la ocasión ha ampliado su colección de dulces hechos en casa con un jugoso bizcocho de chocolate y flores de piña, una galette de piña y fresa y una tarta de piña y crema de almendra.
De la Piña Colada se encarga Bon Vivant & Co (C/ San Gregorio, 8), que prepara una versión 100% home made, con ron, zumo de lima natural, tres cucharadas de azúcar blanca y la pulpa recién extraída de piña, todo ello mezclado a golpe de batidora al momento de servirlo y presentado en la propia cáscara de la piña .
La ruta está disponible hasta los primeros días de octubre de 2014. Aunque estemos en época de operación bikini, creemos haberte convencido. ¡Arriba los platos sanos y con sabor! ¡Abajo las dietas tristes!
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